Una imagen vale más que mil palabras. Esto es válido para la filatelia, el pasatiempo-inversión y auxiliar pedagógico en el coleccionismo de sellos postales. Hemos averiguado que la Filatelia es una actividad que mueve a 700 millones de personas como coleccionistas sin contar las decenas de miles de negocios filatélicos y miles de revistas físicas o por internet al respecto.
Aquí una selección de algunas emisiones postales relacionadas a las gestas de noviembre. Al ser parte de Colombia.
Esta emisión de 1878 tiene una parte del Escudo de Armas de Colombia. La punta del escudo reproduce lo que aquí en un círculo: el istmo de Panamá uniendo los océanos y barcos en los mares en señal de comercio facilitado por el Ferrocarril de Panamá, inaugurado en 1855. las equinas del diseño muestran el blasón colombiano completo pero sin ornamentos. La litografía, técnica empleada para la impresión, gasta la piedra con que se imprime la tinta y tiende a irse borrando parte del diseño o hacerse más débil.
Hubo otras emisiones que sólo mostraban el Istmo recorrido por la línea del Ferrocarril entre Panamá y Colón. Una es de 1882, otra es de 1892 y otra
Cuando la separación, los primeros días se ordenó la confección de sellos de goma manuales para colocar a mano sobre los pliegos de sellos postales la nueva identidad: REPÚBLICA DE PANAMÁ. Por el apuro a veces quedaba al revés, y por la fuerza de sellar, a veces de 14mm se variaba el largo de las dos líneas hasta 19mm.
Luego se habilitaron las imprentas locales para mediante la tipografía lograr colocar una barra que ocultara la identidad COLOMBIA y mostrara de algún modo la nueva: PANAMA con o sin tilde.
En 1906 apareció la primera serie normal y lo primero que se mostró fue el Istmo de Panamá, la Bandera y el Escudo.
Con el tiempo el tema del mapa se volvió bastante recurrente. Además, el escudo también fue ampliamente empleado no sólo en los sellos postales sino también en los timbres fiscales que caen en la Filatelia Fiscal.
Observamos dos ejemplos fiscales. Arriba, un trozo de papel lega o habilitado para el cual se coloca el escudo y se le da determinado valor pecuniario y se le señala un período de un bienio de uso. Abajo, un timbre fiscal, que participa de la misma dinámica.
En 1942 aparece una serie de temas patrios pese a ser de interés turístico. Llama la atención el sello más humilde, de medio centésimo de Balboa, el cual fue diseñado por el maestro Roberto Lewis y muestra la Alegoría de Panamá, considerándose el sello postal más hermoso de todos los tiempos para nuestro país.
En 1953 se celebró el Cincuentenario de la República y se hizo una serie de 12 diseños, pero ninguno presentó un símbolo patrio.
El año 2003 nos ofrece el Centenario de la República, y para ello se confecciona una hermosa serie de 9 diseños, algunos de 2 en 2 y otros individuales.
Una sobreimpresión es imprimir algo nuevo sobre un sello postal ya existente, con o sin cambio de valor. En 2014 aparecen varias sobreimpresiones. Una de ellas dedicada a la figura de Demetrio H. Brid, quien ejerció como Presidente de Facto de la nueva República el 3 y 4 de noviembre, pasando el poder a la Junta Provisional de Gobierno, que a su vez lo entregó al Dr. Manuel Amador Guerrero, designado por la Asamblea Nacional como primer Presidente de la República.
Lamentablemente nuestras monedas no poseen diseños que aludan a la historia Patria más que en unos pocos casos. Uno fue el 75 aniversario de la República; otro el Tratado del Canal de 1977, y de modo obligado y recurrente, el reverso con el Escudo, excepto 1931, en que se mostró una obra de Roberto Lewis en lugar del escudo en sí.
Esperamos que ver las fiestas patrias reflejadas en algo tan especial como sellos postales y algunas monedas, despierte en todos el ánimo de investigar, conocer para así amar y entonces respetar nuestros símbolos.
¡Viva Panamá!